(A Virginia Díaz)
Por: Sary Serrano
Confiésales…
que en tu alcoba
te acompañas de silencio,
que de la nada
te surgen los versos
y en tu almohada
guardas secretos.
Confiésales…
que en tu camino
se escribe una historia,
que tus mañanas
se llenan de glorias,
y tus noches
de leve, leve sereno.
Confiésales…
que tu alma
se eleva como águila,
y es en Las ramas del viento
donde guardas tus recuerdos.
Confiésales…
una vez más:
que el Valle te hace vivir
y el Maguana es tu espejo.
Confiesa…
que vives el sueño,
que ni parpadeas
para no despertar,
que tus pies
firmes están;
pero el corazón dejaste
donde se anidan tus versos